Si existe algún grupo que se ha convertido en un dolor de cabeza para la dictadura chavista de Nicolás Maduro, es el denominado Team HDP, un puñado de hackers venezolanos que ya cuentan en su haber múltiples victorias contra el aparato criminal que mantiene secuestrada a Venezuela. Y cada vez que Team HDP golpea, lo hace en el corazón del sistema rojo-rojito.
Nuevamente, un grupo de hackers venezolanos perforaron la seguridad cibernética del régimen socialista de Caracas, al extraer información del mismísimo Ministerio del Poder Popular para la Defensa de Venezuela.
Según información reportada por el sitio dataconfirmada.com, Team HDP logró filtrar más de 5.000 archivos confidenciales de la Junta Permanente de Evaluación de la Armada Bolivariana, accediendo a información de privilegio sobre Guardias de Honor, DGCIM, SEBIN, integrantes de gobierno en altos cargos y hasta espías chavistas distribuidos en otros países.
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En una nota compartida en Twitter por este equipo de hackers, lo encontrado evidenció a «Ladrones tratando de controlar a su propia banda. Robo de divisas, consumo de alcohol en horas de servicios. Esto es la que llaman la gloriosa Fuerzas Armada del Régimen de Venezuela».
Team HDP se ha caracterizado por romper los sistemas de protección informática del régimen dictatorial del indocumentado. Ya en 2021 ingresaron en la base de datos de la Dirección General de Contrainteligencia Militar, DGCIM, uno de los organismos de represión más brutales con los que cuenta la dictadura de Miraflores.
En esa ocasión, el equipo de hackers contó con la cooperación de exfuncionarios de la inteligencia de Venezuela. Esta incursión en los secretos del DGCIM fue dada a conocer por el periodista Damian Pachter, quien lo hizo público en Israel Ayom, medio de comunicación del país hebreo.
Para ese entonces, se comprobó que el régimen chavista permitió le ingreso a Venezuela de presuntos terroristas chiitas, bajo la cobertura de estudiantes de español como parte de los «programas gubernamentales de estudios de idiomas». Este ingreso se hizo a través de la isla de Margarita, estado Nueva Esparta, la cual se ha convertido en la puerta de entrada del extremismo islámico a Venezuela y Latinoamérica.
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La información obtenida por el Team HDP en aquel tiempo, indicaban que dichos terroristas podrían estar relacionados con tráfico de drogas y de armas, además de estar al cargo del lavado de dólares para el financiamiento del terrorismo a escala global.
En la base de datos hackeada a la DGCIM aparecen algunos integrantes de la familia Maklad, naturales de la aldea drusa de As-Suwayda, una población próxima a la frontera de Jordania, al suroeste de Siria. Algunos integrantes de esta familia están involucrados «… en el comercio de cocaína y el tráfico de minerales estratégicos y el financiamiento del terrorismo internacional».
Otros mantienen actividades relacionadas con el tráfico de cocaína, así como de minerales estratégicos. A esto se le suma el tráfico de mujeres y menores, y tráfico de armas y municiones, las cuales comercializan con las islas holandesas en el Caribe y con las Islas Vírgenes Británicas. Acciones que son convenientemente ignoradas por el alto mando de la dictadura criminal de Nicolás Maduro.
Redacción: Juan Pablo Peñaloza
