La violencia siempre ha sido el arma del chavismo. Desde que el mezquino Chávez llegó al poder, todos los actos propiciados por esta ideología criminal apuntan a destruir al enemigo, con total impunidad. Ahora, en ocasión de una reunión que el presidente (e) de Venezuela tenía planeada en el estado Cojedes, una turba chavista liderada por diputados del PSUV provocaron una situación que incluyó el uso de arma de fuego. ¿Estará el fiscal de comiquitas al tanto de esto, o ese no es su problema?
Como parte de la gira nacional que desarrolla Guaidó en Venezuela, se tenía prevista una reunión en un restaurante de San Carlos, estado Cojedes. Sin embargo, este evento fue salvajemente saboteado por una turba chavista que ingresó en el lugar, agredió a Guaidó y a las personas que estaban con él, provocando destrozos en el sitio.
Guaidó fue sacado entre golpes y amenazas para resguardarlo en la camioneta blindada y retirarse del sitio. A pesar de lo violento de los actos, no se vio presencia de las fuerzas de represión que generalmente se presenta con rapidez para actuar contra ancianos que protestan, estudiantes o mujeres. Como es normal en estos casos, la “ley y el orden” rojita brilló por su ausencia.
Hacía poco tiempo los colectivos atacaron a una reunió que Guaidó tenía en Maracaibo, aunque fueron enfrentados por los partidarios del líder democrático. En este caso, tampoco hizo acto de aparición algún cuerpo de seguridad, así fuera para salvar las apariencias. La diferencia entre el evento de Maracaibo y el de San Carlos, es que en este último se pudo ver a quienes arengaban a la turba para atacar: los diputados oficialista Nosliw Rodríguez y Marcos Antonio Mendoza.
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Según Juan Guaidó, estos diputados son los responsables directos de las agresiones sufridas por él y por sus acompañantes al ser atacados por el populacho al servicio del chavismo. En la página de la Asamblea Nacional írrita de 2020, se indica que ambos agitadores son diputados titulares.
Curiosamente, Nosliw Rodríguez debería estar separada de su cargo ya que participó en las elecciones de 2021 por el cargo de gobernador de Cojedes, fracasando ante Alberto Galíndez candidato opositor. Pero como bien lo han demostrado en infinidad de ocasiones, lo que menos le preocupa a los servidores del régimen es respetar las leyes.
Guaidó aprovechó un live por Instagram para explicar lo sucedido en San Carlos. Aquí aseguró que tanto Mendoza como Rodríguez fueron identificados como los cabecillas del ataque, algo que puede confirmarse en los vídeos tomados durante la agresión.
Señala el presidente (e) de Venezuela que «Fue una emboscada dirigida por diputados del cuerpo parlamentario que usurpa el régimen. Nosliw Rodríguez y Marcos Mendoza, claramente identificados en las imágenes y videos, lideraron esta emboscada en un lugar público, donde estábamos reuniendo a toda la dirigencia de la unidad democrática para fortalecer la unidad».
Exigió el también presidente de la Asamblea Nacional 2015, reconocida por las democracias del mundo, que los agresores asuman su responsabilidad, ya que causaron daños y afectaron la infraestructura del lugar. Indicó que «A los que agredieron hoy, a estos líderes del partido del régimen, háganse responsables por los desastres que causaron en un vivero estadal donde se iba a reunir la dirigencia de la plataforma unitaria tras concluir el gran recorrido por San Carlos y el sector El Retazo».
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Y no sólo se trató de insultos o golpes. Entre los agresores había personas con armas de fuego, las cuales fueron accionadas en contra del vehículo en el que se resguardaba Guaidó. Por suerte, al tratarse de un vehículo de seguridad, resistió los impactos de las balas protegiendo a quienes se encontraba en su interior.
Denunció Guaidó que «Había gente armada, agredieron de manera muy violenta nuestro vehículo. Afortunadamente, es un vehículo de seguridad, precisamente para evitar la agresión de la dictadura». En un comunicado emitido por la Asamblea Nacional legítima, se reitera las acusaciones contra Nosliw Rodríguez.
Agrega la nota que «La turba de delincuentes, enviados y pagados por el régimen, agredió violentamente al presidente Juan Guaidó y a su equipo. Al salir de la reunión, el vehículo en el que se desplazaba el presidente recibió varios impactos de bala accionados por estos grupos».
A pesar de esto, Juan Guaidó aseguró que nadie le obligaría a abandonar las calles, hasta alcanzar la meta de una Venezuela libre, justa y soberana.
Redacción: Luis González
