Un caso, que tuvo origen en un conflicto familiar, amenaza en convertirse en un verdadero dolor de cabeza para el eterno segundón del chavismo, Diosdado Cabello. Todo comenzó con un conflicto matrimonial en Madrid, centrado en una esposa que quiere separarse y en un marido al que no le gusta la idea. Este ambiente, ya de por sí tóxico, se empeora cuando entra en escena el suegro. Esto generó una discusión entre los hombres tan intensa, que los vecinos llamaron a la policía la cual se apersonó en el lugar.
Ahora bien, ¿qué tiene que ver esto con Cabello? Tiene que ver con el suegro de la historia y su relevancia en el esquema de dinero mal habido por parte de Diosdado. Y es que el detenido parece ser, nada más y nada menos que su testaferro… y su yerno amenaza con destapar toda la corruptela escondida por el exsuegro.
Rafael Alfredo Sarría Díaz, de quien se sospecha que es testaferro de uno de los hombres fuerte del chavismo, ya había sido sancionado por la justicia norteamericana en 2018 en el marco de la elección fraudulenta de la AN chavista con la que el régimen creía lavarse la cara ante el mundo. En aquel momento, se sancionó al expresidente de la Asamblea Nacional ilegítima y a sus allegados directos. La medida afectó al hermano de Cabello, José David y a su mujer, Marleny Josefina Contreras. E incluyó al mencionado Rafael Alfredo Sarría quien fue considerado el «testaferro» de Diosdado.
También fueron sancionadas 3 compañías: Noor Plantation Investments, Sai Advisors y 11420 Corp. las cuales tienen su sede en Florida y están relacionadas con Alfredo Sarria. Steven Mnuchin, el secretario del Tesoro para la fecha, señaló que con estas acciones se buscaba atacar a «las figuras clave de la red corrupta de Cabello» acusadas de malversación, blanqueo de capitales y narcotráfico.
A estas «figuras claves» se les acusa de enriquecimiento por el uso de su posición privilegiada para beneficiarse de la corrupción e invertir las fortunas mal habidas en propiedades inmobiliarias en España. A pesar de esto, tal parece que ni la Fiscalía Anticorrupción y la Audiencia Nacional española tiene abierta algún tipo de averiguación en contra de Sarria. Por lo menos hasta le fecha.
En 2018, el portal de noticia Infobae publico un revelador artículo donde se detalla los bienes del testaferro de Cabello conocidos para la fecha, como un avión de 20 millones de dólares incautado en Florida. La publicación también hace referencia a por lo menos 14 propiedades de lujo conectadas con Sarría las cuales estarían esparcidas en por lo menos 3 países del mundo. Estas propiedades, aparentemente adquiridas con recursos ilícitos, llevaron a Washington a abrir un expediente en la llamada Lista Clinton. Esta lista, creada originalmente para bloquear económicamente a los jerarcas de los carteles de droga colombianos, actualmente abarca a todos aquellos considerados por los Estados Unidos como capos en el tráfico de narcóticos a nivel internacional.
De las propiedades detectadas, dos están a nombre de Sarría Díaz y se encuentran ubicadas, una en un condominio en Boca Ratón, en Florida, y la otra en pleno corazón de Manhattan, Nueva York. En cuanto a las firmas sancionadas, se sospecha que estas han sido utilizadas como fachadas en el proceso de compra de inmuebles, realización de inversiones y el desarrollo de diferentes actividades comerciales a nivel internacional.
Aunque, como se dijo anteriormente, en España no hay una investigación abierta contra Sarría, la justicia de este país sí se encuentra en proceso de investigación por presunto blanqueo de capitales de algunos ciudadanos venezolanos afectos a la dictadura. Lo que se derive del presente caso podría llevar a que la situación del llamado «testaferro» de Diosdado se torne mucho más complicada de lo que alguna vez imaginó.
Si bien la detención por la violenta discusión familiar fue hace dos meses, queda mucha tela por cortar. El conflicto entre exsuegro y exyerno estalló cuando Sarrías ingresó a la vivienda de ese último «increpando y amenazando». Actitud que escaló cuando, ante testigos, Salías amenazó a la expareja de su hija con un «Si sabes lo que te conviene, no te metas en esto, tú no sabes quién soy yo». A lo que el exyerno advirtió que contaba con información confidencial.
Independiente de la información que el exyerno posea y de la que esté dispuesto a compartir, lo cierto es que la vida de Rafael Alfredo Sarría Díaz ya no será la misma. Rompió una de las reglas principales de todo testaferro mafioso: conservar un perfil bajo y no atraer problemas. Queda ver cómo el verdadero dueño de su mal habida fortuna solucionará este inconveniente.
Redacción: Luis Alfredo González Pico