Encontrar empleo en la Venezuela chavista es algo mucho, muchísimo más complicado que hace poco más de 20 años, cuando la economía crecía en democracia. Las empresas de aquel tiempo fueron expropiadas ilegalmente o simplemente cerraron a consecuencia de la grave crisis que el socialismo se encargó de llevar a cada rincón de la nación.
De 100 opciones de empleo existentes en 2002, hoy en día sólo se encontrarán 10 por parte de empresas constituidas. Por lo menos, así lo indica lapatilla.com en referencia a «el Índice de Empleo o de Talentos que registra la firma Econométrica, a través del análisis de datos a portales web como Boomerang, Computrabajo, Linkedin, Empleate.com y avisos clasificados de periódicos como El Universal, a lo largo de 17 años, ante la ausencia de datos oficiales del Instituto Nacional de Estadísticas».
En la nota se indica que «Ha habido tres períodos de fuerte contracción de empleo desde que el chavismo gobierna. El primero fue de 2002 a 2003, tras el paro petrolero». Sobre este punto, el experto economista José Toro Hardy ha indicado que durante este lapso de tiempo, sólo en PDVSA fueron despedidos 20 mil trabajadores, todos ellos con más de 15 años de experiencia. Ello significa que, a consecuencia de la irresponsabilidad de Chávez quien fue el causante de despedir a estos profesionales, Venezuela perdió 300 mil años de experiencia en el campo de la industria petrolera.
El siguiente periodo de contracción ocurrió en 2008 con la crisis financiera mundial. Durante esta época los precios del petróleo bajaron, afectando el ingreso al fisco. El tercer periodo de caída en las ofertas de empleo en Venezuela, el más largo, se presentó entre 2013 y 2020, destacando con mucho este último año a causa de la pandemia desatada por el virus chino. Según el FMI, durante este año de parálisis total el país perdió el 83% de la economía.
Según Efraín Almeida, investigador de Econométrica, «La última vez que Venezuela registró mayor demanda de empleo fue en 2008, antes que comenzara la crisis financiera internacional. Desde ese año hasta septiembre de 2021, se ha perdido el 84% del índice de empleo. El sector económico que más bajas ha tenido en las vacantes de talento humano, ha sido el petróleo, minería y gas por el proceso de desinversión que ha experimentado la industria, repercutiendo en la caída de la producción».
Con referencia a la industria petrolera, cuando el nefasto Chávez llegó a la presidencia, PDVSA producía 3.120.000 barriles diarios de petróleo. En la actualidad, esta cifra no llega a los 600.000 barriles diarios. A consecuencia de esto, el país no se ha podido beneficiar el incremento en el precio del barril a nivel internacional. Si esto sucede con el sector petrolero, el industrial no está en mejores condiciones. De un total de 11.198 empresas existentes hace dos décadas (durante la democracia), sólo quedan 2.121 empresas. De estas, la mayoría apenas llegan al 25% de su capacidad de producciones. Y a veces, menos.
Esto no es todo. El economista Alejandro Castro señala que «Con la migración, Venezuela ha perdido su bono demográfico, es decir, la mayoría de la población económicamente activa que va de 15 a 60 años se ha ido del país quedando más población dependiente, como niños y ancianos que no aguantan una carga laboral».
Según la Encuesta Condiciones de Vida (Encovi), elaborada por la UCAB, la UCV y la Universidad Simón Bolívar, se esperaba que la apertura de una ventana de oportunidades laborales entre 2000 y 2045. La razón de esto era una baja en la tasa de nacimientos. A menor población nueva, mayores recursos para la expansión económica.
Por desgracia, como bien lo aclara Anitza Fréitez, coordinadora de la Encovi, al portal informativo Efecto Cocuyo «En cinco años se perdieron casi 3 décadas que quedaban de bono demográfico, porque el 65% de valor de dependencia demográfica de los adultos mayores que debía alcanzarse en 2045 se obtuvo en 2020. Hemos llegado al final del período del bono demográfico sin haberlo disfrutado». Todo gracias al socialismo.
Édgar Urbáez, economista, señala que «El Gobierno cree que a través de bonos y dádivas se puede resolver el problema laboral y eso ha ocasionado que buena parte de la mano de obra calificada se haya ido, beneficiando a otras naciones desde el punto de vista tecnológico y educativo, arruinando la calidad de la producción, ocasionando que florezca la buhonería, la economía informal, que a pesar de que ayuda en el sustento de las familias venezolanas, no crea crecimiento económico».
Según el economista, Efraín Almeida, la fuga de capital humano de personas con alto nivel educativo, formación y sobre todo experiencia, ha hecho que ahora las empresas estén contratando en su mayoría a personas recién egresadas de la universidad, en un rango de edad que oscila entre los 20 a 25 años. «Estos jóvenes han tenido que asumir, incluso vacantes que habían quedado vacías a nivel gerencial, que deberían estar siendo ocupadas por personas con mayor preparación, pero ha sido una herramienta usada por las empresas para la sostenibilidad operativa», expresó.
Como vemos, la principal causa en la desaparición de las ofertas de empleo en Venezuela son las erradas decisiones económicas tomadas desde el punto de vista político. Mientras el socialismo sea el que maneje los destinos el país, todo lo que se puede esperar es que la deprimente situación actual continúe… o empeore.
Redacción: Luis Alfredo González Pico