Mientras Delcy Rodríguez, la siniestra hermanita de Jorge Rodríguez, anuncia que va a denunciar a Colombia ante la CPI por «exterminio de migrantes venezolanos», lo cierto es que quien ordenó el asesinato de los dos jóvenes venezolanos en Tibú, Colombia, se oculta en territorio venezolano bajo la protección del régimen de Nicolás Maduro.
Javier Alonso Veloza, alias John Mechas, es la persona señalada por la policía colombiana de ordenar el homicidio del adolescente de 15 años y del joven de 23 en la población de Tibú, en el Norte de Santander. Los jóvenes habían sido detenidos por comerciantes quienes los acusaban de intentar robar en una tienda. Dichos comerciantes llamaron a la policía para que fueran por los acusados, llamada que repitieron en varias ocasiones sin que se apersonara ningún uniformado. En su lugar arribaron hombres armados, en motos, para llevarse a los jóvenes. Ante esto, los pobladores se opusieron e intentaron evitar el secuestro, pero fueron amenazados por los sujetos quienes finalmente lograron raptar a los venezolanos. Poco tiempo después aparecieron sus cuerpos abaleados y con una nota de «Ladrones».
El acusado, John Mechas, se unió a las FARC en 1996 llegando a ser el comandante del frente 33. Fue detractor de los Acuerdos de Paz de 2016, retando al estado colombiano. Sus seguidores controlan los municipios de El Tarra y Tibú en el Norte de Santander, precisamente donde asesinaron a los niños. También tienen gente en Hacari, Convención, Sardinata, San Calixto y en la capital de departamento, San José de Cúcuta. Pero sus campamentos se encuentran en el estado Zulia, bajo las narices de las FANB quienes se aseguran de no molestarlo.
Es desde su refugio en Venezuela que John Mechas planea ataques contra la población civil colombiana y sus fuerzas públicas. Según la Defensoría del Pueblo en Colombia, en 2019 las autoridades lo acusaron de «la instalación de un carro bomba que fue abandonado en el anillo vial de Cúcuta con explosivos y propaganda de dicha organización». También está señalado de organizar un ataque con bomba en contra de militares el 15 de junio y de participar con su grupo en el atentado contra el helicóptero presidencial de Iván Duque, ataque ocurrido el 26 de junio. Además, es conocido por realizar asesinatos selectivos similares a los que acabaron con la vida de los jóvenes venezolanos.
Es por esto que si Delcy Rodríguez quiere justicia para los jóvenes muertos y no sólo utilizarlos como excusa para atacar al gobierno de Colombia, debería enfocarse en atrapar a este asesino que se encuentra en territorio venezolano. Pero el chavismo ha demostrado que poco le importa lo sucedido a los jóvenes migrantes ajusticiados. Y es que para la dictadura de Nicolás Maduro, amparar a terroristas es mucho más redituable que proteger a la población venezolana. Sólo en socialismo.
Redacción: Luis Alfredo González Pico
