Que Citgo sea la salvación de las refinerías de Venezuela, es una interesante propuesta que ilumina con optimismo el futuro del país. Una propuesta realista que depende de un punto en especial: el levantamiento de las sanciones impuestas a la dictadura de Nicolás Maduro.
Aunque Citgo es parte de PDVSA, el hecho de pertenecer a los activos controlados por el gobierno interino del presidente (e) de Venezuela, Juan Guaidó, la convierten en una refinería independiente de facto, con capacidad comprobada para surtir al país del necesitado combustible, por lo menos temporalmente, una vez que se dé inicio a la transición política que los venezolanos reclaman.
Citgo cuenta con tres refinerías en territorio norteamericano, dos de ellas ubicadas en la costa del Golfo. Estas están diseñadas para procesar el crudo pesado venezolano, aunque ahora procesa petróleo norteamericano, canadiense, colombiano y mexicano. De lograrse un cambio político en Venezuela (prácticamente la única razón para levantar las sanciones), podrían recibir crudo venezolano a cambio de productos, entre 100.000 b/d a 150.00 b/d de combustible. Hay que recordar que antes de la llegada del desastre chavista, las refinarías en Venezuela procesaban 1.3 millones de b/d siendo el consumo interno de 500.000 b/d. Consumo que por la actual situación del país se ha reducido a 100.000 b/d. Esto significa que, en un primer momento, Citgo podría ayudar a poner el país en marcha (literalmente).
En cuanto a la reactivación de la industria petrolera, el papel de Citgo es vital. Dado que la PDVSA rojita no posee ninguna credibilidad entre las industrias a nivel mundial -y que los proveedores que necesita exigen pagos por adelantado-, sería Citgo la que trabajaría como un puente para obtener los productos necesarios que permitan a las casi desmanteladas refinerías procesar combustible en territorio nacional para no depender en un 100% de la importación. Además, ayudaría en el proceso de recuperación y puesta en marcha del parque industrial que la industria petrolera posee en Venezuela.
Como vemos, las posibilidades de reactivar a Venezuela son reales. Una vez retornemos a la democracia, el apoyo de Citgo y el esfuerzo de todos los venezolanos, nos permitirán salir adelante, dejando atrás el lodazal en el que nos ha hundido por más de 20 años las miserias del chavismo.
Redacción Luis Alfredo González Pico