En marco del evento Prospectivas UCABH 2021, el sociólogo Humberto Briceño indicaba que no solo sigue presente las desigualdades sociales en el país, sino que estas se vienen profundizando.
Durante su participación mencionó que en este proceso social hay 5 factores que influyen directamente y estos son la dolarización de la economía, la diferencia en el ingreso de los trabajadores del sector privado y el sector público, la dolarización de las remuneraciones, el impacto de las remesas y los cambios en la composición demográfica.
El coeficiente de Gino es el instrumento que se utiliza para medir este factor de desigualdades sociales en Venezuela. En esta escala hay 10 puestos de riqueza y la separación que se marca en el país viene dada por la siguiente relación: la persona que está en el puesto 10 que es el nivel más rico duplica en ingresos al que está en el puesto 9 y casi estaría triplicando al puesto 8.
Los salarios se comparten también entre extremos lo que se traduce en más desigualdad social, en el sector privado los salarios subieron un 41% y en el sector público decayeron un 82%. Esto trae como consecuencia más déficit en la nómina pública y hay más gente que inicia a trabajar por cuenta propia, debido a que el trabajador por cuenta propia tiene la capacidad de indexar su salario.
Briceño indica que las remesas genera una microdesigualdad entre las personas que reciben remesas cuyo monto oscila entre 30$ a 100$, y quienes no reciben nada y deben generar divisas con actividades comerciales.
El acceso a los servicios también influye en la medición de las desigualdades sociales. No tiene la misma calidad de vida las personas que han podido, por ejemplo, comprar plantas eléctricas a aquellos sectores en donde deben ajustarse a los incesantes cortes de electricidad.
También hay micro desigualdades en la salud, ya que una operación de apendicitis puede estar entre $10.000 y $15.000 y los hospitales públicos no son la alternativa. Anteriormente, la clase media utilizaba seguros, que en muchos casos los pagaba el gobierno. Pero esos desaparecieron y entonces la desigualdad empieza a darse entre quienes tienen y pueden pagar un seguro y quienes no lo pueden hacer.
En su ponencia, Humberto Briceño indicó que aunque el pobre se está haciendo más pobre, la clase media no existe y el rico se está haciendo más rico, hay un cambio de paradigma o de expectativas. La sociedad tenía la convicción del Paternalismo del Estado (gobierno, proveedor que generaba y tenía la responsabilidad de entregarle a todos). Ahora esta convicción está migrando a que las personas se hayan visto en la necesidad de asumir las obligaciones hacia sí mismos, hacia sus familias, hacia el país, hacia las empresas, hacia las comunidades, afirmando que no es descartable que dentro de este cambio de expectativas se pueda generar un cambio en el comportamiento social y político.
Esto se traduce en que el rol de la sociedad civil se haga participativa y tenga mayor presencia en la selección del camino que lleve a la mejora del país y al acortamiento de la brecha que se está abriendo socialmente en estos momentos.
Redacción: Gabriela Parra