Temas que hablamos en este programa:
Las cifras de «la revolución»: 7,8 millones de venezolanos presentaron desnutrición entre 2018 y 2020. Un informe realizado por la Organización de Naciones Unidas para la Alimentació y la Agricultura (FAO), Unicef, la Organización Mundial de la Salud (OMS) destaca que entre 2018 y 2020 7,8 millones de venezolanos presentaron desnutrición, es decir, 27,4 % de la población. La cifra contrasta enormemente con los 2,2 millones de ciudadanos que no cumplian con su alimentación balanceada entre 2004 y 2006, registrándose un aumento de 19 % en 12 años. Si vemos como los chavistas van engordando a medida que la población va menguando de hambre, podemos comprender mejor que el chavismo es una ideología de hambre que se alimenta de la desgracia del pueblo.
Grupo de Contacto Internacional exigió liberación de los presos políticos y el fin de la intimidación en contra opositores venezolanos. Los países del llamado Grupo de Contacto Internacional para Venezuela, auspiciado por la Unión Europea (UE), entre ellos España, apelaron este martes a los actores políticos y a la sociedad civil para avanzar «con urgencia y buena fe» en la resolución de la «profunda» crisis política, económica y social que atraviesa el país y que afecta a toda la región. Los firmantes llamaron a las autoridades venezolanas «a garantizar los derechos civiles y políticos, la libertad y la seguridad de todos los actores políticos y la puesta en libertad de todos los presos políticos, incluidos los que se encuentran en situación de arresto domiciliario, así como el fin de la intimidación contra los actores políticos y la sociedad civil».
Johnson & Johnson y AstraZeneca estudian una eventual modificación de sus vacunas contra el COVID-19 para evitar los cuadros de trombosis. Un grupo de científicos independientes y de la Universidad de Oxford investigan posibles soluciones en la conformación de ambos inoculantes para erradicar los trastornos en la coagulación, que han aparecido de manera inusual en personas recién vacunadas. Johnson & Johnson y AstraZeneca están llevando a cabo las primeras investigaciones para determinar si las modificaciones de sus vacunas contra el COVID-19 podrían reducir o eliminar el riesgo de coágulos sanguíneos raros pero graves asociados con las inoculaciones, dijeron fuentes cercanas al caso según declaraciones recogidas por The Wall Street Journal. El WSJ informó el martes de que científicos independientes y el socio de AstraZeneca, la Universidad de Oxford, también participaron en los esfuerzos. Ambas vacunas se han relacionado con el riesgo de trombos, aunque los reguladores han dicho que los beneficios de las vacunas superan ampliamente los riesgos.